El Madrid recupera autoestima en Mestalla

La BBC ha renovado la autoestima de un Real Madrid que caminaba entre tinieblas en partidos de relumbrón. Los blancos continúan sin enamorar en su juego, no pretende eso Zidane, pero ya le sonríen ciertos intangibles que hasta ahora tenía casi siempre en contra. Y con ello son capaces de ganar en plazas tan difíciles como Mestalla. Dos penaltis tan claros como absurdos de Montoya y la poca pericia de un Valencia sobreexcitado, permiten a los blancos recortar puntos a un rival directo por el segundo puesto de la Liga (1-4).
El Madrid mandó de manera holgada en el marcador, pero sufrió en el juego. El guión pudo ser bien diferente si su rival hubiese dispuesto de más de pausa en los metros finales. Los blancos gobernaron el partido en lo emocional, pero sus constantes vitales continúan en reconstrucción, como demuestra la cantidad de balones perdidos en campo propio o el pobre segundo tiempo, en el que vivieron a merced de un Valencia encorajinado.

LA SUERTE SONRIO ESTA VEZ AL ENTRENADOR FRANCES ZINDINE ZIDANE " ZIZOU " EN MESTALLA, EN ESTA TEMPORADA DE MONTAÑA RUSA QUE ESTA VIVIENDO EL MADRID ESTA TEMPORADA

La moneda cayó del lado que buscaba Zidane en Mestalla, en esta montaña rusa que es el Madrid esta temporada. Los deméritos rivales ayudaron a un equipo que vive de la confianza, porque el fútbol no le resulta lo relevante. El exazulgrana Montoya fue quien desequilibró el duelo con dos penaltis tan absurdos como claros para enterrar a su equipo, que había merecido mayor recompensa sobre todo en el primer tiempo. Si el Madrid se tambalea no hay que hacerle concesiones, porque en cualquier momento el gigante puede despertarse.

El Valencia fue un equipo excesivamente emocional, que se desquició de manera progresiva ante sus propios errores. Su verticalidad en el juego le permitió disponer de opciones de ataque en todo momento, pero ese también fue su principal pecado. El primer penalti nació de un córner de los locales tras el que los blancos lanzaron el contragolpe. Llegó Cristiano en posición franca y Montoya se precipitó y terminó arrollándolo. El portugués engañó a Neto en el disparo.
El gol le sentó de maravilla a los blancos, que dispusieron ahí de sus mejores minutos. Kroos y Modric ganaron presencia en campo contrario y el Valencia se acomplejó por su fragilidad. La efervescencia de los locales tardó poco en regresar. Kondogbia decidió echarse el equipo a la espalda para devolverle confianza. Dos remates francos hicieron sacar a Navas lo mejor de sí mismo.

LOS DESPISTES DE MONTOYA CAUSARON QUE EL VALENCIA SIEMPRE IBA DEBAJO EN EL MARCADOR? A CONTRA CORRIENTE EN TODO MOMENTO? BUSCANDO LA REMONTADA

Los de Marcelino habían igualado el duelo en lo futbolístico cuando llegó el segundo error de Montoya. El lateral empujó a Benzema en un salto en el área cuando el balón se perdía por la línea de fondo. No dudó Estrada Fernández, tampoco Cristiano, que ajustó el disparo al palo para hacer el segundo.
Los blancos gobernaban el marcador, pero el dueño del partido era el Valencia. Y la incomodidad de los blancos no iba sino a crecer con el paso de los minutos. Rodrigo tuvo la más clara de los suyos al borde del descanso, pero su remate se fue alto. Tras el descanso la presión valencianista se intensificó todavía más y el rendimiento del Madrid cayó en picado.

Apareció Parejo para poner la pausa que le faltaba en los últimos metros a los locales y muy pronto llegó el gol de Santi Mina. El vigués remató en el primer palo un córner e hizo imposible la estirada de Navas. Minutos después salvaría a su equipo el costarricense, sacando con el pie un tiro colocado de Parejo que Mestalla daba por gol.
Percutieron los locales con todo lo que llevaban dentro mientras el Madrid sufría en silencio, sin ser capaz de proponer nada más que balones largos en busca de Gareth Bale. Zidane dio entrada a Lucas Vázquez, Asensio y Kovacic y esta vez los cambios le vinieron a su equipo. Pronto los blancos comenzaron a retener el balón y a salir con mayor criterio. La sentencia llegó con una combinación entre Asensio y Marcelo, en la que el brasileño aprovechó un despiste de Neto. Kroos logró el cuarto cuando el Valencia ya había bajado los brazos.
El Madrid recupera la pegada y sobre todo la autoestima. No es sencillo ganar en Mestalla por mucho que enfrente tuviera a un equipo mermado en lo físico. Las sombras sigue existiendo, pero las victorias son el mejor alimento para un equipo que ya ha fracasado y, por tanto, poco tiene que perder esta temporada.

AQUI OS DEJAMOS EL RESUMEN DEL PARTIDO